
La decisión de renunciar a una herencia es cada vez más frecuente en España. Uno de los motivos fundamentales es que aceptarla genere más problemas que beneficios. Cuando existen deudas que se trasladan a los herederos e impuestos de sucesiones elevados, es necesario analizar en detalle para saber qué conviene.
Antes de proceder a la aceptación o renuncia es conveniente estar informados sobre el patrimonio del fallecido. Es decir, bienes, derechos y deudas, pues la herencia incluye todo. También es fundamental conocer todos los factores que influyen para no afectar la situación financiera del heredero.
Ventajas y desventajas de renunciar a una herencia
La repudiación de una herencia tiene como ventaja la liberación de la obligación al pago del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Ese importe se traslada de forma automática a los herederos que acepten el legado. Asimismo, para el porcentaje de impuesto se tomará el más ventajoso para el beneficiado. A mayor cercanía de parentesco, mayor reducción.
Ahora bien, si la renuncia es a favor de otros beneficiarios se debe pagar doble impuesto. Por un lado, el de Sucesión correspondiente a la herencia, por el otro el de Donación al ceder los derechos.
En lo que al patrimonio se refiere, la ventaja de renunciar a una herencia es que se protegen los bienes particulares. Al no aceptar el legado patrimonial, no se corre el riesgo de tener que asumir las deudas y avales del fallecido con su patrimonio actual y futuro.
La desventaja en este caso es que no se puede rechazar solo una parte de la herencia. Una vez que se produce la renuncia, la misma es irrevocable y no se tiene acceso a ningún beneficio que haya podido sustentar.
Renunciar a una herencia a favor de otro heredero
El derecho de acrecer faculta a una persona a renunciar a su herencia en beneficio de otro heredero. El renunciante no llega a adquirir su porción y como consecuencia crece la parte del tercero beneficiario. Recordemos que todo heredero hijo del fallecido tiene derecho a una parte hereditaria, denominada legítima.
Cuando la herencia es a través de un testamento, este derecho no debe estar excluido en el documento por el testador. Asimismo, es necesario que haya nombramiento de dos o más herederos por testamento y no se expresen designaciones especiales de bienes.
Por otro lado, cuando no existe un testamento, solo tiene validez si no concurre con el derecho a la representación.
Otro caso es el de la renuncia traslativa, que no es específicamente una renuncia. Se trata más bien de una cesión de derechos y bienes a otro heredero. Para esto es requisitos que dispongan de la herencia y luego la transfieran. Corresponde pagar el Impuesto de Sucesión y Donación.
¿Cuesta dinero renunciar a una herencia?
Los costes asociados varían según las circunstancias correspondientes en cada caso. Si se opta por la renuncia pura y simple, se debe realizar un documento público frente a notario y el único coste será de 100 euros aproximadamente. Queda el renunciante libre de toda tributación.
Cuando la renuncia es traslativa, es decir a favor de otro heredero, se deben abonar el porcentaje correspondiente del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Asimismo, deberá afrontar otros impuestos por donación de lo heredado.
Por último, si la renuncia a la herencia se realiza una vez cumplida la prescripción del impuesto, se paga el impuesto como donación a terceros. Por este punto, es muy importante estar atento a los plazos.
¿Cuándo no se puede renunciar a una herencia?
Según el Código Civil no es posible renunciar a una herencia antes que la persona de quien heredar haya fallecido. Solamente se da lugar a este derecho cuando es certero el fallecimiento y se reconoce como heredero.
En otros casos particulares será necesaria la intervención de un juez que apruebe o rechace la misma. Por ejemplo, los menores de edad que quieran repudiar la herencia necesitan la resolución judicial.
Los representantes de herederos discapacitados, las asociaciones y otras fundaciones que sean incluidas como herederas, también necesitan autorización judicial.
Por último, están sujetas a la aprobación del Gobierno, la Administraciones Públicas que deseen rechazar una herencia.
¿Existe un plazo para renunciar a una herencia?
En un sentido general, los ciudadanos tienen el derecho a renunciar a una herencia en cualquier momento. De manera directa no se establece en la normativa vigente un plazo límite. Sin embargo, de forma indirecta es necesario atender a dos puntos:
- Debe ser después del fallecimiento de la persona de quien se hereda
- Para no quedar afectado al impuesto de sucesión se debe realizar dentro de los seis meses posteriores al fallecimiento
- SI se decide renunciar a la herencia tras el proceso de aceptación a beneficio de inventario, el plazo es de 30 días
Renunciar a una herencia no es un proceso tan simple como parece. Es importante contar con un asesoramiento legal experto en sucesiones para no perder tiempo y dinero.