La tecnología y la informática crecen a pasos agigantados. Pero como se suele decir hecha la ley hecha la trampa, con ellos han surgido los delitos informáticos, un tipo de delito muy peligroso. Y es que dentro de los diferentes delitos que se pueden cometer y vienen recogidos en nuestro Derecho Penal, los delitos informáticos presentan una característica que los hace especialmente peligrosos y es su desconocimiento por las víctimas y la imposibilidad de localizar al delincuente en muchas ocasiones. El mayor temor es la vulnerabilidad de nuestra privacidad ante algo que no podemos ver y que no sabemos cómo proteger. Y si no sabemos esto posiblemente tampoco sepamos cómo actuar ante este tipo de delitos. Es por ello que debemos contar con un abogado penalista, experto en temas informáticos, y es que no solo sabrá el procedimiento que debes llevar ante estos casos, es muy probable que previamente pueda ayudarte a tener una mayor seguridad informática.
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Los delitos informáticos en nuestro Código Penal

Los avances informáticos han traído consigo tantas ventajas como peligros. Por tanto, las leyes han de actualizarse para regular toda una nueva tipología de delitos que han surgido en los últimos años. Sin embargo, no se trata de una tarea sencilla.